viernes, 23 de junio de 2017

Luxo mi lujo.


No quiero más recuerdos, si no tengo su abrazo,
Su mirada leal, su peluche en mi espacio.
Está en cada comida, está en todos mis pasos,
Mi puerta está vacía cada vez que la abro,
Sin esa, algarabía, qué dolor, qué arrebato.
Para mi fantasía, trato de leer algo,
En todo me aparece, revolcándo mi estrato,
El piso se me va, alimento a unos gatos.
Ayúdame Dios, mío, tú sabes de qué hablo.
Sabía que era así, no sé si aguanto tanto.

No hay comentarios.: