Martí
en mi vida. 1
De la beca saque varias experiencias y por
supuesto grandes amigos, fue por eso que en el año ’89, estando en 4° Año de la
carrera, hube de retomar el camino hacia el campo y encaminarme una vez más
hacia Güira de Melena, esta vez no para estudiar si no para aprobar un examen.
Ate
Cuba Revolución era una asignatura que se imponía en la carrera y que había que
sacar como todas las demás, sólo que llegábamos a ella después de pasar por
todos los estilos históricos que iban dejando una secuela y un legado de
belleza inolvidable y ahora debíamos enfrentarnos al arte “Pop” en la Revolución y decir que era lindo,
a mí particularmente no me gusta nada, se le acepta a Andy Wharol , por ser de
los iniciadores y no es lo mismo el rostro de Marilyn Monroe, en una serie
repetida que va mudando la gama de colores al rostro del argentino que
participó del proceso revolucionario, que dicho sea de paso, ambos rostros se
convirtieron en ícono universal, el de ella por su carismática y sensual
belleza que la hacía aparecer bien en las innumerables fotos que le hicieron a
lo largo de su corta vida y el de él por una sola foto que le hiciera que le
hiciera Korda, donde se mezcla la
belleza masculina con la potencialidad de los estados idílicos del ser humano.
La foto es un espectáculo hasta hoy, pero no me sensibilizaba verla en esos tonos, como tampoco quería ver a otros líderes –como a nuestro apóstol- ni actos de aquel momento, como si fueran “comics”, a los que tampoco soy muy dado. Me gustan las cosas de verdad. Por tanto la profesora M.P. de esta asignatura me suspendió dos veces llevándome a Mundial.
Se acercaba la fecha del Mundial y recordé que mi amigo de adolescencia Michel Velarde tenía una cartomántica y espiritista tremenda, que lo sacaba siempre de las “peores” situaciones, por lo que ese fin de semana, fui al Parque Manila y allí cogí la ruta 185 que me devolvería a mi pasado reciente.
La foto es un espectáculo hasta hoy, pero no me sensibilizaba verla en esos tonos, como tampoco quería ver a otros líderes –como a nuestro apóstol- ni actos de aquel momento, como si fueran “comics”, a los que tampoco soy muy dado. Me gustan las cosas de verdad. Por tanto la profesora M.P. de esta asignatura me suspendió dos veces llevándome a Mundial.
Se acercaba la fecha del Mundial y recordé que mi amigo de adolescencia Michel Velarde tenía una cartomántica y espiritista tremenda, que lo sacaba siempre de las “peores” situaciones, por lo que ese fin de semana, fui al Parque Manila y allí cogí la ruta 185 que me devolvería a mi pasado reciente.
Llegué a Güira a eso de mediodía; para mi suerte, “el Miche”ahí estaba, pues podía haberse ido como solíamos hacer en tiempos antaños, para la playa El Cajío, que está en esa parte del sur de La Habana.
Playa El cajío de G6uira de Melena. |
Llegamos
y la puerta estaba abierta y Miche se
quedó atrás. Di entonces de cara con dos
fotos-carnet ampliadas de dos mujeres, que eran la misma persona, pero
en diferentes épocas; peinadas igual; una raya al medio y dos trenzas cruzadas
por encima de la cabeza. La primera en
tono sepia por el paso del tiempo y la segunda mejor conservada. Ambas estaban en un mismo marco de moldura
blanca tallada y para cada una había un vaso de compota rusa, lleno de agua y al centro otro de Marpacíficos
moñudos.
De
pronto apareció la imagen de la mujer del cuadro y yo palidecí, Miche viró la
cara aguantando la risa, pues ya sabía cuál sería mi reacción, conociéndome
bien, después de haber convivido conmigo en el mismo alberge por tres años y
haber pasado las mismas vicisitudes los dos*.
Nos
recibió, como si nos estuviera esperando, colando café y con una hilera de tazas
hechas de laticas de compota NENÈ. Me
miró bien percibiendo mi palidez; volteó el rostro hacia las fotos y me dijo
feliz; Tata, mi abuela y Tía Tata, que me crió como si fuera mi madre, que murió,
al poco tiempo de nacer yo, como eran gemelas idénticas, pongo la foto de una
sola, si no parecería una galería de arte; -remitiendo mi pensamiento a Andy
Warol y su serie de retratos poli cromáticos-.
Sin saberlo aun, estaba tocando en la yaga. Pero yo soy como la misma persona y conmigo
se rompió el molde, porque no parí.
Tomamos
el café en lo que Miche me presentaba y
yo le explicaba -por arribita- a lo que iba.
Se levantó y de otro ambiente que sería el comedor me llamó, ya con las
cartas en la manga y digo “la manga”, porque las guardaba en la manga de una
blusa de su abuela. Un tejido que debió
ser algodón blanco y ahora –en aquel momento- estaba casi marrón. Barajeó y me dijo: parte en cuatro partes.
Viró el monto del centro superior y mirándome, frunció el ceño, como queriendo reconocer en mí a otra persona y solo atinó a decir:
Viró el monto del centro superior y mirándome, frunció el ceño, como queriendo reconocer en mí a otra persona y solo atinó a decir:
-
El maestro, a ti te acompaña el maestro.
-
Qué maestro Irma?
-
El único maestro, Martí. Has venido aquí porque él quiso que
yo te dijera esto, él quiso que tú supieras que él te acompaña. Tú no eres
maestro.
-
No, pero siempre quise. Yo enseño pero en un museo. Soy
museólogo y guía de museo.
-
Pero tú no terminas ahí. Tú serás maestro.
Cerrando las cartas, me dio una obra para ponerle al espíritu
de José Martí y sonriente me dijo: No estudies, que ya estás aprobado.
Salí de Güira, agradecido y lleno de esperanzas, como si ya
hubiera hecho el examen.
Llegó el mes de agosto y con él, el marcado y esperado día. Entré al aula, me senté, en mi pupitre, invoqué a Martí y el
lápiz corrió solo por la hoja.
En septiembre estaba ya en 5to. Año de mi carrera de Historia
del Arte.
Es por eso que cada año cuando llegan las fechas de su ciclo
vital, lo celebro y venero como a un santo y ostento en la sala de mi casa, un
pequeño y adorado busto suyo que me trajera
de regalo, de Cuba, una gran amiga, al que lo escoltan una imagen de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba. y otra de una sevillana, en honor a la gitana de la cartomántica, que me anunciara, su presencia en mi vida.
Ref.
Ver: “Adiós Toqui, adiós Violeta”; “Albergue tres de pie”; “A una,otra”.
Nota: Pueden comentar o calificar, en las casillas más abajo. Gracias.
Nota: Pueden comentar o calificar, en las casillas más abajo. Gracias.