"...no
hay solución, no la encuentro,
sólo me queda el consuelo de llorar,
por dentro"
Ahora trágate las lágrimas, te lo dije que detrás de esa oveja, había una cobra, pero seguiste y seguiste, porque no quieres oír a tu madre, no ves que esta que está aquí , no se tiñe el pelo por gusto, que estas canas, son años y estas arrugas, son dolores y no de parto ni de cabeza; son dolores de aquí, de dentro, que mira como tengo este bajo-seno de inflamado, porque ahí está el alma, que muchos tragos amargo que tuve que meterme con tu padre, y tu abuela y la rebombiá de aquella familia sucia y envidiosa.
por dentro"
Ahora trágate las lágrimas, te lo dije que detrás de esa oveja, había una cobra, pero seguiste y seguiste, porque no quieres oír a tu madre, no ves que esta que está aquí , no se tiñe el pelo por gusto, que estas canas, son años y estas arrugas, son dolores y no de parto ni de cabeza; son dolores de aquí, de dentro, que mira como tengo este bajo-seno de inflamado, porque ahí está el alma, que muchos tragos amargo que tuve que meterme con tu padre, y tu abuela y la rebombiá de aquella familia sucia y envidiosa.
Cuando
vine a despertar ya estaba con la otra de brazo paseándose por Prado y yo
lavando y planchándole la ropa que le compraba y mantenía, pa restregarse con
aquella. Haciéndose la señora; favor que me hicieron, al final míralos cómo
están, porque lo que brilla no es siempre oro.
Lo vi ayer, que parecía un carretillero y a ella la botaron del trabajo
por robarse un bombillo, porque aquí en este plano tierra todo se paga. Haz
bien y no mires a quién. Si no me dan
ese impulso, no hubiera encontrado a Génaro, que no es bello como tu padre, yo
ya tampoco lo soy, pero me representa y me acompaña, terminó de criarte a ti,
para que ahora me vengas llorando por un hombre que se fue con un italiano. Si eso se venía venir. Cuando lo trajiste que
le di el visto, no fue bueno, pero te vi feliz y me dije que escarmiente por su
propia cabeza, aunque no sea “barbero”, que es el único aprende por la cabeza
de otro.
Aguanta que todo pasa, hasta la gua-gua. Te me
das un baño, te vistes bien y te me perfuma y dale pa la Rampa, que ahí tengo
picadillo y tu sabes que a tu madre, le gusta con aceituna. Así que arranca y
no olvides que “el Taíno, tiene que
luchar su yuca”
Nota: Pueden comentar o calificar, en las casillas más abajo. Gracias.
Nota: Pueden comentar o calificar, en las casillas más abajo. Gracias.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario