sábado, 26 de noviembre de 2016

A mis cincuenta y uno


Ha sido mucha su presencia,
Ha sido extensa la batalla,
Como lidiar ahora con su ausencia.
Nada fue conseguido con migajas,
Abandonamos nuestra amada  tierra, y
Mantuvimos nuestra escencia intacta.
Se vaciaron las mesas,  consecuencia
muchas vidas partidas y sin patria.
Tanta razón perdida en la experiencia,
De  salir adelante  en nuestra causa.
No es de alegría, tampoco es de tristeza,
Se nos ha ido el tren en la esperanza.
Sólo la fe de una vida más cierta,
Que el sacrificio no saque más ventaja.
Lo que no entiendo por qué este desencanto
Alguien me explica, hay algo que no encaja.
Qué veinte años no son estos cincuenta,
Que me calan la piel llegando al alma.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me identifico con tu sentir

Unknown dijo...

Gracias.